Se formó la de Troya entre alcalde y concejal en la ciudad de Medellín, Antioquia: "¡ME VOY Y NO VOY A PAGARTE, HIJUEPUTA!
Por: Jose Corro
En un incidente que ha dejado impactada a la comunidad política de Medellín, el alcalde se vio envuelto en una acalorada discusión con un concejal durante una reunión del concejo municipal. Durante el intercambio de palabras, el alcalde perdió los estribos y profirió insultos hacia el concejal, dejando a todos atónitos.
Pero lo más sorprendente fue cuando, en medio de su arrebato, el alcalde declaró públicamente que no le pagaría al concejal lo que le correspondía. Esta afirmación generó un gran revuelo entre los presentes, ya que el pago de los honorarios es un derecho fundamental de los concejales y una obligación del municipio.
El concejal afectado, Sebastián López, señaló que Quintero estaba en la Corporación insistiendo en la serie de insultos contra los concejales de oposición y de reclamos por el supuesto saqueo de $20 billones de pesos, del que el alcalde culpa al uribismo, comentarios que incluso hizo ayer en el Congreso de la República.
La situación se volvió aún más tensa cuando otros concejales se solidarizaron con su compañero y criticaron duramente al alcalde por su comportamiento irrespetuoso y su negativa a cumplir con sus obligaciones financieras. El episodio rápidamente se volvió viral en las redes sociales, generando un fuerte rechazo por parte de la población.
Sin embargo, la confianza en el alcalde ha quedado seriamente dañada. Muchos ciudadanos y líderes políticos han cuestionado su capacidad para ejercer su cargo de manera responsable y respetuosa. Se han planteado interrogantes sobre su liderazgo y se ha pedido una investigación exhaustiva sobre este incidente y otros posibles abusos de poder.
La polémica sigue en curso mientras se espera que el alcalde cumpla con su promesa de pagarle al concejal y se tomen medidas para evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir en el futuro. La ciudadanía exige transparencia, respeto y responsabilidad por parte de sus líderes políticos para garantizar un gobierno justo y equitativo.
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