¿Se siente un cambio?

#Editorial  

Viendo los diferentes informes de las nuevas administraciones en las principales ciudades del país, se siente un ambiente de cambio en la forma como los mandatarios dan un mensaje común de recuperación social. Un concilio generalizado en busca del bienestar y la seguridad en todos los sectores de la comunidad.
Se está enviando un aviso directo al gobierno nacional, que con sus políticas permisivas han hecho todo lo contrario a garantizar la estabilidad y la seguridad, dándole prioridades y prebendas a los delincuentes, narcotraficantes, jíbaros, atracadores, consumidores de estupefacientes etc. buscando la desintegración social desde su unidad principal que es la familia.“esta coyuntura política puede traer grandes beneficios para la ciudadanía”
Las nuevas propuestas de los gobiernos locales harán que trabajen con mayor compromiso y en la búsqueda de rápidos resultados que demuestran lo equivocadas que estaban las cosas en ese ambiente de división social y caos que propiciaron los anteriores alcaldes y gobernadores para justificarse en el poder.
Les toca trabajar duro, y “solos” porque el mensaje de presidencia ya fue claro, no habrá apoyos a las regiones que no sean afines a las ideas y pretensiones del gobierno nacional.
En nuestro ámbito local, por lo menos en la administración distrital, se acaban las mentiras y señalamientos de odios sociales y de clases, así como las inversiones equivocadas a las verdaderas necesidades de la ciudad en general.
Se siente una nueva oportunidad, un positivismo, una verdadera esperanza de prepararnos a los retos que se vienen, para las cuales tenemos corto tiempo y requieren del compromiso de todos los samarios en unión y en acción conjunta.
Por lo menos así lo pude percibir en los diferentes sitios donde interactúe con muchas personas este fin de año, algunos incluso ex empleados de la anterior administración que ven con buenos ojos ese cambio de aire, la verdad a todos los tenía asfixiados con tantos conflictos y citaciones a las que tenían que acudir y respaldar de forma obligada.
Se sintió un ambiente diferente más cordial y sin duda alguna con muchas expectativas ahora si de un verdadero cambio que la ciudad pide en todos los sectores.
El agua,  el alcantarillado,  los 500 años de Santa Marta, la recuperación del centro histórico,  una nueva malla vial,  el P.O.T.,  planes efectivos para terminar las obras abandonadas,  la seguridad en general,  el control de espacio público de toda la ciudad,  la venta de estupefacientes, la movilidad, el posicionamiento de un turismo de calidad para nacionales y extranjeros, fomentar el empleo por la alta informalidad, garantías para el comercio, la empresa, la industria y el turismo. Que sumen a este desarrollo y a la búsqueda nuevas fuentes de financiamiento a estos proyectos para que no se vean afectados por la negativa nacional.
El reto ya lo tenemos y estamos llamados trabajar por el beneficio de toda Santa Marta, para ello requerimos de las acciones de nuestros representantes, senadores, concejales, los gremios, la fuerza pública y la sociedad en general, esto no es solo compromiso de un alcalde, de sus secretarios y sus colaboradores.
Como indiqué creo que este nuevo comienzo que nos da la oportunidad de saber de qué estamos hechos y hacía dónde queremos ir para dar resultados de verdadero desarrollo a corto plazo a Manta Marta.
Pensemos en grande. Santa Marta lo merece.