Fue adquirida por el gobierno de Fuerza Ciudadana con recursos públicos para fortalecer la atención médica en el Magdalena. Hoy, más de dos años después, yace abandonada frente al hospital local de Concordia, convertida en un símbolo del descuido institucional.

Frente a las instalaciones de la ESE Hospital Local de Concordia, en el departamento del Magdalena, permanece una unidad móvil de salud en completo estado de deterioro. Lo que alguna vez fue presentado como un proyecto para llevar servicios médicos a las zonas rurales más apartadas, hoy se desmorona bajo el sol y la lluvia.

El vehículo —adquirido durante el gobierno de Fuerza Ciudadana con dinero del pueblo— lleva más de dos años inmóvil y expuesto a la intemperie, con vidrios rotos, llantas reventadas y equipos internos corroídos por el abandono.

Residentes del municipio aseguran que la unidad nunca llegó a cumplir su función. “Solo la trajeron una vez para la foto y ahí la dejaron”, comenta un habitante de la zona, que prefiere no revelar su nombre.

La comunidad pide la intervención de los entes de control, como la Contraloría y la Procuraduría, para investigar por qué un bien adquirido con recursos públicos terminó convertido en chatarra frente a un hospital que, irónicamente, carece de herramientas para atender emergencias básicas.

El caso expone una vez más las grietas en la gestión de los recursos del sector salud en el Magdalena, y la falta de seguimiento a inversiones que, en lugar de fortalecer el sistema, terminan oxidándose en el abandono.