Por invasión, playas, manglares y biodiversidad, en la vereda Mendihuaca a 15 minutos del Parque Tayrona en Santa Marta, están en peligro

Por : @Yamiperiodista

En la actualidad hay una gran preocupación mundial sobre el cuidado recuperación de 

Ecosistemas estratégicos para la sostenibilidad del planeta, de un planeta que los humanos hemos deteriorado, sin embargo las luchas internas, entre instituciones del 

orden nacional y local, evaden sus responsabilidades y un gobierno local inexistente e 

indolente ante el deterioro acelerado de un entorno  paradisiaco. 

Les empiezo a contar un preocupante descuido local, que al parecer se hace cada día 

más recurrente en temas de animales y medio ambientalistas. Ni hablar de otros delicados temas de ciudad. 

Por la foto de una turista, que visito a Santa Marta y no fue a lo formal sino a lo 'en 

cualquier parte' me llamó la atención algo realmente serio, pues en el lugar que estuvo además de informal, 

está pasando algo muy delicado en una de las playas más hermosa y maravillosas con 

las que Dios bendijo está zona linda del planeta.

Se trata de un grave daño ambiental que viene pasando hace alrededor de 5 años, al 

menos desde que se ha reportó por los propietarios de la zona, ubicado en los predios

Panamericano y Los Doctores, en la vereda Mendiguaca, del corregimiento de 

Guachaca, Distrito de Santa Marta, donde se une la playa y río, formando una maravillosa 

conjugación de belleza natural, de colores, de vida e incluso se observan los picos nevados de 

la Sierra Nevada de Santa Marta. 

En donde a alguien o algunos, les pareció que era más importante la ganancia económica 

que preservar el medio ambiente, la Madre vieja, ecosistema único en el mundo por su 

biodiversidad, que sirven de hogar a especies en vía de extinción. 

Una ganancia 

económica por encima de todo, de dañar la naturaleza misma, acabar el medio ambiente;  por encima de todo incluye desde construcciones no permitidas en terrenos de la nación, 

lo más grave, el componente de daño ambiental que parece no importarle a nadie, al 

parecer ni a las autoridades y entes ambientales de la región.

Se trata de lo aberrante de una situación, donde a la Madre Vieja de Manglares en esa 

zona le están vertiendo los desechos y aguas servidas, una Madre Vieja que recorre por

varios kilómetros paralela al mar desde el parque Tayrona hasta límites con la Guajira, 

sirviendo de zoo criadero a especies únicas y que desaparecerán si no hacemos nada. 

Esta es un accionar que atenta contra la naturaleza misma, pero también contra la 

legalidad, la formalidad, el buen turismo que caracteriza a Santa Marta y todo el 

Magdalena. 

Es definitivamente todo un gran daño que, al parecer quienes lo están haciendo no saben que se trata de un grave delito, bueno y más, cuando no hay entidades 

como la DIMAR, CORPAMAG, PROCURADURIA AMBIENTAL, SECRETARIA DE 

GOBIERNO DE SANTA MARTA y DADSA, a quienes según nuestra investigación, les han enviado oficios y al parecer, se hacen los de la vista gorda para evadir la responsabilidades y ejercer la autoridad que les compete.

 Redacción Radio Magdalena conoció ptecisamente que, formales del sector 

reportaron la situación a las autoridades competentes, pero que de algunas pequeñas 

acciones, reuniones, oficios y fotos... no pasó nada y menos la solución esperada. 

Pero antes de seguir, hablemos de que clase de Manglares son los que entre otras cosas 

se están perjudicando en esta situación en particular. 

Con más de 290 mil hectáreas de manglar, Colombia se ubica en el cuarto país del 

continente americano con mayor extensión de este bosque. 

Distribuidas de la siguiente forma: 201.178 localizadas en la región pacifica, y 71.742 en la zona del Caribe.

Hoy, son una especie más de la naturaleza en vía de extinción.

Colombia, además, ocupa el primer puesto por tener los Manglares más altos y mejor 

conservados, compitiendo con países como Nigeria, Gabón, Venezuela, Tanzania, Costa Rica, entre otros.

Volviendo a la problemática y sitio del caso. Este lugar parece que no para de tener 

dificultades. Ha se ser por su ubicación geográfica, natural, bella y estratégica para muchas cosas. 

Lo que si es claro es que la comunidad vecina, pescadores y propietarios legales de 

alrededor les preocupa en gran manera la forma como día a día contaminan esta 

importante zona de gran potencial ambiental y turístico, su río, manglares, biodiversidad 

y naturaleza en general, sin que al parecer halla alguien que haga algo que pare el daño, se recupere la MADRE VIEJA, el borde de playa y se salve este lugar del estado, de todos y de gran envergadura natural. 

Espere una segunda entrega de esta investigación. Ojalá ya con las respuestas de dichas actividades competentes