Jueces no podrán dictar medidas cautelares contra Carlos Pinedo Cuello, en lo que resta de este año 2.023
Abogados del mandatario electo, Hollman Ibáñez y Ariel Quiroga, se notificaron y ahora tienen 5 días para presentar descargos, pero mañana se inicia la vacancia judicial. Cualquier decisión sobre el particular será tomada a mediados de enero, tras el inicio del año judicial 2.024
Los jueces de la República que conocen de las acciones legales promovidas desde Fuerza Ciudadana con el propósito de que el alcalde electo de Santa Marta, Carlos Alberto Pinedo Cuello, no asuma el uno de enero como mandatario de los samarios, no podrán disponer medidas cautelares en lo que resta de este año que está por terminar, como tampoco lo podrá hacer el Tribunal Contencioso del Magdalena.
La notificación personal que ayer hicieron los abogados Holman Ibáñez y Ariel Quiroga, en representación de Pinedo Cuello, conlleva a que ahora tendrán 5 días para presentar los descargos, y debido a que mañana se iniciará la vacancia judicial, sólo hasta mediados de enero próximo, cuando se reabra el citado Tribunal, se reactivarán los términos procesales y así avanzar en el proceso que no debe pasar de un año para el fallo definitiva.
Ibáñez y Quiroga hacen vigilancia a los procesos en contra de Carlos Pinedo, y en ese ejercicio encontraron que en el Tribunal Contencioso del Magdalena existen dos acciones de nulidad, y en una de ellas solicitan la suspensión provisional del acto de elección, por lo cual el citado Tribunal ordenó las notificaciones personales y le entrega a la parte demandada 5 días para responder, para lo cual no hay tiempo en este año judicial.
Pinedo asume la defensa de sus derechos legales adquiridos en las elecciones del pasado 29 de octubre, y por eso otorgó poderes a los profesionales del derecho antes mencionado, que están al frente de su defensa.
Finalmente Ibáñez le entregó un parte de tranquilidad a los samarios, en el entendido de que Pinedo Cuello asumirá su mandato el primero de enero, para darle cumplimiento a lo prometido, en procura del progreso y bienestar de los samarios y demás residentes en este capital
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